Pasajes del destino: Capitulo Sexto.
“...unos segundos mas tarde, balbuceo palabras que a fin de cuentas no dicen nada..., no puedo entender, no puedo creer. Es hermosa querido lector, es simple a la vista, pero compleja de explicar, estoy sorprendido...
Ella como si nada, se adelanta en el tiempo..., y percibe mi sorpresa:
-Hola! Soy Jael..., me mude la noche de la tormenta, no sabia que en la costa la lluvia y el viento podían mezclarse así...
-Soy Marcos, un gusto..., perdón si solo me limite a escuchar, es que te apareciste de la nada...
-No quise asustarte, salí a caminar y me llamo la atención tu mirada perdida, como buscando algo, pudiste encontrarlo?
-Si mi fé en el destino no falla, si..., te encontré, no preguntes como, cuando ni porqué... pero hace días que te espero, perdona mi sinceridad, o si no esperabas esta respuesta..., pero es todo lo que puedo decirte, mi mirada no esta perdida..., simplemente volvió a sentir...
Y el silencio lleno el vaso..., la calma se había apoderado del momento, segundos mas tarde sus palabras entraban en escena...
-En mi pueblo, cultivaba Rosas..., al venir aquí todo eso quedo atrás. La noche de la tormenta, pedí un deseo y lance al viento, el único fragmento de belleza que me había quedado de aquel recuerdo..., una rosa blanca, que por algún motivo no se marchitaba...
Nada podía sorprenderme a esta altura, y sabiendo lo que me iba a decir, me anime a preguntar...
-Cual era tu deseo esa noche?
-Encontrarte..."
Ella como si nada, se adelanta en el tiempo..., y percibe mi sorpresa:
-Hola! Soy Jael..., me mude la noche de la tormenta, no sabia que en la costa la lluvia y el viento podían mezclarse así...
-Soy Marcos, un gusto..., perdón si solo me limite a escuchar, es que te apareciste de la nada...
-No quise asustarte, salí a caminar y me llamo la atención tu mirada perdida, como buscando algo, pudiste encontrarlo?
-Si mi fé en el destino no falla, si..., te encontré, no preguntes como, cuando ni porqué... pero hace días que te espero, perdona mi sinceridad, o si no esperabas esta respuesta..., pero es todo lo que puedo decirte, mi mirada no esta perdida..., simplemente volvió a sentir...
Y el silencio lleno el vaso..., la calma se había apoderado del momento, segundos mas tarde sus palabras entraban en escena...
-En mi pueblo, cultivaba Rosas..., al venir aquí todo eso quedo atrás. La noche de la tormenta, pedí un deseo y lance al viento, el único fragmento de belleza que me había quedado de aquel recuerdo..., una rosa blanca, que por algún motivo no se marchitaba...
Nada podía sorprenderme a esta altura, y sabiendo lo que me iba a decir, me anime a preguntar...
-Cual era tu deseo esa noche?
-Encontrarte..."
Comentarios
besos muchos.
cariños
gracias por estar ahi..
Hoy me miré al espejo.