El sonido del silencio.

Era de noche, tu espalda al descubierto retrataba el amor que nunca confesamos…, los lunares en tu piel, eran testigos obnubilados. Sobraban las palabras, tal vez por eso nos mirábamos…, sentí la quietud de mi alma, la sed saciada de mis besos, tu perfume en cada corazonada…

El sonido de tu risa, datil que no sabe de tiempo…, se desnuda paso a paso, me regala su aliento. Se tiñe de un azul sereno cada rincón de esta casa, el lienzo que ayer nos excluía del deseo…, hoy trasluce la sinergia de ciertos encantos…

Definición: El corazón se asemeja al silencio, porque no conoce de lenguajes que expliquen, porque el la mirada se queda inmóvil, los latidos inertes, y la coyuntura se asemeja a un largo camino…, convirtiendo a uno en el tonto mas cauteloso a la hora de caminar…

El silencio entonces me lleva por donde quiero, cuando no se a donde ir…, me enseña lo que quiero, cuando no se que teoría aplicar…, me ayuda a descubrir lo que un mortal sin brújula, ni encantos ajenos al corazón…, pueda encontrar.